
"-Condesa, anoche se perdió un sueño fantástico. No sólo un sueño que se desvanece y al amanecer se olvida. No, uno de los que perduran.
Cuando no vino anoche, todo parecía perdido, pero no me rendí.
E hice bien: me recompensaron.
El reloj volvió a dar las nueve."
La Dama del Armiño (The Lady in Ermine, Ernst Lubitsch, 1948)
No hay comentarios:
Publicar un comentario