El 29 de julio de 2008 fui obsequiado con mi primer ipod analógico, obra del artista Guillermo Martín Bermejo. La primera lista de reproducción llenó todas las etiquetas blancas que venían de serie con el aparato, pero su capacidad y memoria lejos de agotarse no hicieron más que empezar a procesar.
¡Oyoyoi! ¡Se me había escapado esta entrada! ¿Cómo puede ser eso?
ResponderEliminarTendré que ver la película. No me fío.